El camino que lleva a Portalrubio
"El camino sube o baja según se va o se viene. Para el que va, sube; para el que viene, baja. Levantado sobre la llanura. Lleno de casas, como una alcancía donde hemos guardado nuestros recuerdos...Allí donde el aire cambia el color de las cosas; donde se ventila la vida como si fuera un murmullo; como si fuera un puro murmullo de la vida..."
Redacción
El bar de Portalrubio tiene nuevo propietario. Se trata de César Alcocer, vecino de la localidad cercana de La Peraleja que ya ha comenzado a acondicionar el local con la idea de abrirlo, probablemente, el 1 de abril, según ha informado a esta redacción el alcalde del pueblo, Antonio Vicente. La poblacion del municipio recupera así este servicio fundamental como punto de encuentro y de actividad tras su cierre a finales de enero por las restricciones de la pandemia de COVID-19 y la no continuidad de sus entonces gestores por no cumplir con los requisitos establecidos en el pliego de condiciones del contrato firmado con el consistorio, dado que se trata de un negocio ubicado en la planta baja de un inmueble de propiedad municipal (ver Portalrubio Es Más, 14 de febrero de 2021).
Hay que recordar que la hostelería debe cumplir en la actualidad con las medidas establecidas por la Junta de Castilla-La Mancha para frenar la expansión del coronavirus, manteniendo un aforo del 50% en el interior de los bares (sin servicio en barra) y del 75% en el exterior, mientras que el uso de la APP ‘Ocio Responsable’ seguirá siendo voluntario y el cierre a las 23 horas. Por su parte, el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud acordó ayer para todo el país la limitación de reuniones en espacios públicos cerrados a como máximo 4 personas y a 6 en abiertos (en los privados solo convivientes) durante el periodo de Semana Santa, del 26 de marzo al 9 de abril, fecha hasta la que también seguirá cerrada perimetralmente la comunidad.
Las cláusulas asumidas por su nuevo regente consisten en un pago anual por adelantado de 200 euros al año (IVA incluido) —asumiendo el Ayuntamiento los gastos de luz y agua, excepto el pellet para la estufa— y otros 250 euros para colaborar con la Asociación Cultural con motivo de las Fiestas de San Roque —cuando se vuelvan a celebrar—. También ha tenido que presentar la documentación obligatoria a nivel estatal para contratar con una administración pública: el alta de autónomos, los certificados de Hacienda y la Seguridad Social y un seguro de responsabilidad civil. El contrato es de un año que podrá prorrogarse indefinidamente si ambas partes no resuelven lo contrario y el adjudicatario se hará cargo de las tareas de limpieza del Centro de Salud y del resto de dependencias de la parte superior del inmueble, colaborando en la custodia de llaves, en las tareas de apertura y en el encendido de la climatización cuando sea necesario. El bar deberá permanecer abierto durante todos los meses del año, estableciéndose un día semanal de cierre a pactar y un horario mínimo de apertura —salvo por la normativa especial contra la COVID-19— entre las 8h y las 24h, pudiéndose ampliar o reducir en función de la demanda.